martes, 14 de abril de 2020

Trabalenguas. Eso es el programa que hice, un trabalenguas porque entender eso, amigos es un desafío descomunal.  Y ahí está, funcionando hasta el día de hoy pero no hay manera, cuando releo ese código siento que otro lo escribió antes, que hay algo ahí que no es mío, que luché durante horas en algo que no tenía sentido ni destino, sin embargo ves que otro lo usa, lo ejecuta y decís, bueno por algo será, si sucede conviene.  Entonces salgo de la computadora, me vuelvo hacia mi amigo y le pregunto hasta cuándo, cuánto tiempo más lo usará, si estará conforme el próximo año cuando cambie el círculo calendario si seguirá funcionando en su máquina y en su cabeza, porque además funciona ahí eso lo tengo muy claro, y creerá que está bien que vale la pena que tiene sentido.  Y me dirá que sí, que fue importante ponerle huevos a la situación que de otra manera no hubiera prosperado que de no haber sido por eso por aquellos días, hoy no tendría nada.  Y fue una larga espera, algo que debí haber pensado más quizás, para no ocasionar algunos daños como el de que hoy tengamos que movernos en bicicleta, dicen que lo que vale, cuesta y esa es la única explicación que le encuentro, poder trabajar así, con esta soltura y con esta claridad en la compu, es lo único que cuenta.  Veremos si los demás piensan lo mismo.

Estoy cansado, recién empieza el año y ya estoy cansado.  Queda mucho todavía, eso lo vemos y cuando decimos mucho, es mucho.  Salir de esta pandemia costará lo suyo.  Aquí todos, quien más quien menos, pensarán que falta un milagro, que de esta no salimos más, que habrá cosas que ya cambiaron para siempre, pero no, seguramente en unos meses la normalidad volverá a transcurrir día a día, y todos contentos.  Lo que desconozco es ahora,  cómo haremos para sobrevivir porque en mi caso particular, estoy tranquilo de estar aquí en casa, acompañado pero, ¿cómo haremos porque el trabajo no abunda, y si tengo que irme a Mendoza?  Será difícil, lo se.  Tendremos que negociar, habrá que resolverlo de alguna manera, lo menos dolorosa posible, pensar por ejemplo que yo me quedo aquí, y ella va con sus hijas, que la extrañan, y la necesitan.  Durante un tiempo, hasta que pase la locura que nos tiene agarrados de las pelotas.

Ayer, discutíamos sobre seguridad en internet.  No quiero dejar de mencionarlo porque tiene su importancia.  Anteayer decía que estaba bueno, dejar de lado los mendocinos y volcarme de pronto a conversar con los lugareños, hacer de twitter un lugar amigable para los locales, y eso intenté en ese mensaje solo que con los tapones de punta, pateando una puerta, a los empujones como debe ser, como hice siempre, como me enseñaron.  No aprendo más.  Y tampoco quiero aprender ya estoy grande.

Insisto, donde hay dinero hay seguridad y aquí no lo hay, ¿entonces de qué seguridad me estás hablando, si en el mundo del software libre capea la pobreza, decime?  Porque no hay dinero para invertir.  Claro, ¿qué sistema usarán en apple para videoconferencias?  Que te lo ofrezcan gratis no quiere decir que sea seguro, en eso estamos de acuerdo, pero que sea libre, tampoco.  Bueno por demás está decir que si se publica el código es más seguro, claramente no es el caso de un sistema como zoom imagino que al no ser código libre ellos pueden tener en sus líneas algo que sea inseguro para el usuario.  ¿Por qué es más seguro el código hecho por apple?  Ellos tienen un prestigio que garantizar.  Estos otros, no.  El único prestigio es el de ganar más adeptos. (?)

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