martes, 23 de abril de 2019

Suena bien esto de buscar código en internet y apropiárselo de manera prolija eso sí, confiando que la fuente es confiable y por sobre todas las cosas, ha compartido esa pieza de programa precisamente para que uno la utilice y pueda resolver alguno que otro problema.  Si no de su cliente, al menos suyo propio, como hoy que me encontré con la dificultad de un código escrito para una versión de php un par de números anteriores al actual, y un simple conversor escrito y publicado en github me salvó de perder toda una tarde buscando la manera de actualizarlo.

Era una simple conexión a una base de datos que ahora utilizaba otro esquema para conectarse.  Y eso había que resolverlo entendiendo bien de qué se trataban los cambios.  Y no era para hacerlo en una media horita, bien había que dedicarle unas cuantas horas a la tarea.  Si bien es cierto que me pierdo de entender finalmente cómo hay que hacerlo porque el programa lo resuelve, estoy satisfecho porque funcionó.  No perdí más tiempo del prudencialmente necesario por así decir.  Ahora, la aplicación funciona y puedo avisarle al cliente.  Fijate que todavía no lo hago y eso que ya está listo y podría ser beneficioso comunicarlo pero no, no hay apuro porque la aplicación que encontré en internet y me facilitó la tarea, hizo que ganara tiempo.  Entonces, puedo tomarme un ratito para compartir yo a su vez, esta anécdota con Uds, mis lectores.

Continuemos entonces con el resto de las tareas.  Porque ahora tengo que darle un estilo llamativo a la aplicación.  Esto es lo que me cuesta, y sinceramente no me agrada.  Tengo que buscar entre miles de fuentes una que quizás le guste al usuario de mi cliente.  Claro, él va a decir que no le gusta a él, y deberé de estar conforme con ese dato, que capaz nada tiene que ver con el gusto del usuario.  En fin, cosas que suceden.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Relatar, nada.

 Se dijo en la oficina que hacía calor y que había que prender el aire acondicionado, de todos modos estamos preparados para lo peor.  Hoy, ...